ANSIEDAD Y DEPRESIÓN
Los trastornos de ansiedad son terriblemente comunes durante la adolescencia, ya que es la etapa en la que los jóvenes comienzan a preocuparse por su futuro, por si sacarán las notas que les permitirán estudiar lo que quieran, si encontrarán trabajo, su cuerpo, posibles parejas, conflictos con sus grupos de iguales…
Causas Principales
Los trastornos de ansiedad se caracterizan por el sentimiento de miedo y preocupación excesivos, en forma de respuesta anticipatoria a una amenaza futura, así como alteraciones comportamentales que están asociadas a dicha amenaza, ya sea esta real o subjetiva.
Por su parte, la depresión, se caracteriza por un estado de ánimo deprimido, acompañado de sentimientos de tristeza, de vacío o irritabilidad en los más jóvenes, así como pérdida de interés o placer por todas o casi todas las actividades, la mayor parte del día o casi todos los días. Muchas veces, observamos que los síntomas depresivos vienen acompañados por problemas de insomnio, pérdida de peso, así como agitación, fatiga o pérdida de energía, sentimiento de inutilidad, dificultad para concentrarse, para pensar o para tomar decisiones.
Como mencionábamos anteriormente, esta etapa vital esta caracterizada por las nuevas preocupaciones por temas relativos al futuro, de los cuales hasta ahora no eran muy conscientes, o lo veían como algo muy lejano de lo que preocuparse… cuando estas preocupaciones son percibidas con la desesperanza de un futuro incierto, en muchas ocasiones derivan en cuadros depresivos. En estos días en los que los adolescentes no dejan de escuchar, hablar sobre la crisis económica, sobre lo complicado que está encontrar trabajo, etc. en muchas ocasiones afrontan los retos y preocupaciones propios de su edad con un estado de ánimo muy pesimista y desesperanzado, pensando que todos sus esfuerzos no servirán de nada, y desembocando en esta patología, por desgracia, ya tan clásica de esta edad.